Como hacer conservas
Las conservas caseras son una buena alternativa para aprovechar alimentos de temporada. Prepararlas en casa de forma artesanal, te va a asegurar un producto natural y de extrema calidad que te permitirá disfrutarlo a lo largo del año.
No obstante, al hacer conservas caseras tienes que tomar unas medidas higiénicas para evitar la proliferación de microorganismos en ellas. Es conveniente que te informes previamente del tipo de alimentos que son más susceptibles de conservar en casa y los que no.
Normas generales
Esterilización de los tarros y tapas a utilizar
Evidentemente, se utilizarán tarros de vidrio perfectamente lavados. Antes de añadir el alimento, se sumergen los botes y tapas en una cazuela con agua hirviendo. Coloca un paño de algodón al fondo de la misma, añade los tarros y tapas y cúbrelos con agua. Tenlos hirviendo durante 20 minutos.
Una vez los saques, deberás utilizarlos inmediatamente procurando no tocar el interior de los tarros y tapas con las manos.
Llenado de los alimentos
Llénalos casi hasta el borde y al instante tapa firmemente. Dale unos golpecitos encima de la mano o en un paño de cocina para que todo el aire suba.
Tratamiento térmico de la conserva.
Aunque se puede hacer al baño maría, por seguridad, yo siempre lo he realizado en olla a presión en la segunda anilla. De esta forma nos aseguramos una temperatura de ebullición del agua más alta. Hay algunos microorganismos (los más peligrosos) que pueden aguantar perfectamente 5 horas a 100º.
- En una olla a presión, pon un paño de algodón en el fondo.
- Pon los botes en posición vertical y llena con agua fría o templada hasta medio centímetro por debajo de la tapa. El agua no debe cubrir bajo ningún concepto la tapa.
- Cierra la olla y ponlo a hervir durante 20-25 minutos en la segunda anilla.
- Cuando ya esté listo, saca los botes y los pones invertidos en un paño. Ahí en esa posición es donde tienen que reposar hasta que se produzca el vacío.
¿Qué tarros utilizar para las conservas caseras?
Utiliza principalmente tarros de 370-400 ml. Son el tamaño ideal para consumir una vez tengas abierta la conserva casera. Piensa que una vez la abras, ha de guardarse en el frigorífico y consumir antes de los 6-7 días.
Las tapas son muy importantes, no las reutilices, puedes comprarlas fácilmente, no son caras y te darán seguridad a la hora de realizar tu conserva.